17 de agosto de 2014

Santuario




La vida es aun mejor si estamos juntos, por las mañanas cuando el rocío llena tu piel desnuda de mordiscos, besos y gotas de agua, y mis herrantes manos que coleccionan pasos sobre tu cadera, y la rodea con dos dedos , tu piel se eriza mientras tu dormida te estremeces y agitas, Venus se convierte en mi mejor amiga y juntos volamos por las olas y hondonadas de tus mares, llegando lejos y aflor de piel, te desatas, vaguida, dura y suave y húmeda, mi dulce caminar digital se convierte en una tempestad que agita tu ser, constante mientras el mal de tus caderas se vuelve incontrolable y serpenteante. Intento contenerte para regresarte a la vida pero tus ojos, tus manos que me estrujan y tu cuerpo entero piden revoltosamente un final inmediato, mis brazos aprisionando tus alas listas para ser desplegadas, sin más, un ensordecedor grito de tan amada Venus indica que se avecina tu metamorfosis y brillas, vuelas y te escapas de tu propio cuerpo, de tu mente y sales de la habitación que se hace de noche, un alma libre es lo que surge de tan efímera rudeza, y yo mientras aguardo con el desayuno en la cama dentro de la habitación que ya no es de noche, ya que la iluminas.


Y ahora,

la vida es aún mejor si estamos juntos,

ya que sabemos como hacer de cuatro paredes

todo un santuario.





Christian Ochoa Rojas




No hay comentarios:

Publicar un comentario