Deja que te mienta, cierra los ojos y déjame entrar entrar por tus dedos,
que no hacen mas que pedirme,
que les diga que me amas.
Pero ahora mas que nunca
que me he dado cuenta que quieres mirarme
y quieres que te diga que me amas
y que no te mienta.
Deja que te mienta,
cuanto te encuentras a la distancia,
cuando sea de día o, simplemente,
cuando seas mía,
deja que te mienta,
que te mienta con las manos,
con las caricias,
que te envuelva con este terso y dulce sentimiento,
y así nunca dejaras de verme,
ya que si un día dejara yo de mentir,
dejaría de vivir, de latir,
pero sobre todo de decir
que ya no eres mía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario